Los trabajadores de Ecijanova acusan al PP de mentir sobre la empresa
El Comité de Empresa de Ecijanova Vocación de Servicio SL ha salido al paso de las declaraciones de la viceportavoz del Partido Popular de Écija, Silvia Heredia, en referencia la sentencia que declara improcedente el despido de dos trabajadores municipales.
En un comunicado, los representantes de los trabajadores desmienten la afirmación de Heredia de que el PP negoció con “los representantes sindicales de las distintas empresas municipales para llegar a un acuerdo de bajar el sueldo” a las personas que cobraban más de lo estipulado por ley para esos puestos de trabajo y que el despido de los dos empleados ahora declarado improcedente se debió a que “no quisieron bajarse el sueldo como hicieron el resto de sus compañeros”.
También desmienten los trabajadores de Ecijanova a Heredia cuando da a entender que “el resto de trabajadores de Ecijanova estaba de acuerdo con la bajada de sueldos” y que “esa bajada de sueldos se hacía conforme a los sueldos que se percibían en el Ayuntamiento de Écija por parte del cuerpo de laborales y funcionarios”.
“Las declaraciones de la señora Heredia son falsan al decir que los representantes de los trabajadores acordaron una bajada de los sueldos”, afirma con rotundidad el comité de empresa, que aclara que “los representantes sindicales siempre dejaron claro que estaban en contra de una bajada de sueldo de ningún trabajador, toda vez que esas bajadas se iban a realizar, además, de manera totalmente arbitraria y sin la justificación pertinente”.
La decisión de bajar los sueldos de los trabajadores municipales la tomó el PP “de manera unilateral, desatendiendo los consejos de los representantes de los trabajadores” al igual que “todo el proceso de novación subjetiva”, sin atender “los consejos y alternativas que los representantes de los trabajadores ofrecieron durante aquellos meses, por lo que es falso que todo se hiciera de acuerdo con los representantes de los trabajadores”.
Además, los trabajadores aseguran que el recorte de sueldos – “una decisión injusta y arbitraria” – se llevó a cabo, además, “bajo amenaza de despido inmediato para aquel que no acatara esta decisión”, concluyen.