Tientapanza reparte premios a los mejores del año que termina
Fernando Rodríguez Martín, abogado que está a punto de jubilarse, encarna al Tientapanza de este año que, además de desfilar por su barrio del Carmen ha repartido juguetes a los niños y entregado premios a asociaciones y particulares que se han distinguido en su actividad este año.
El popular personaje de la Navidad ecijana paseó este sábado por ‘su’ barrio. La organización ha decidido este año entregar siete premios y dos diplomas a diversas asociaciones y particulares a los que quiere distinguir en diversas categorías.
Así, entregarán el premio Astigitano 2015; el premio al Emigrante; el premio a la Empresa; al Deportista del año; la Asociación del año; el Autónomo de 2015 y el Premio Tientapanza a la Solidaridad. Además, ha regalado juguetes a “niños necesitados”, según la organización. También está previsto entregar un diploma a los ancianos de más edad de la ciudad y a la nota más alta en la prueba de acceso a la universidad (PAU) conseguida por un estudiante de Écija.
Fernando Rodríguez, el Tientapanza de 2015, es abogado especializado en derecho tributario. Ejerce desde 1978 en Écija, ciudad a la que volvió con once años. La Asociación Cultural Tientapanza le ha elegido el año que se jubila para encarnar al tradicional personaje que, cada Navidad, visitaba a los niños ecijanos, les tocaba la barriga para comprobar que hubieran comido y musitaba “Así todo el año”.
Junto a esto, la organización tiene previsto repartir “entre 200 y 300 regalos a niños necesitados de Écija, de acuerdo con las asociaciones de vecinos”, según Juan Marín, presidente de la Asociación Cultural Tientapanzas, “porque de lo que se trata es de ir engrandeciendo al Tientapanzas cada año”.
El peculiar personaje de las navidades ecijanas guarda cierto parecido con el Olentzero vasco y el gallego Apalpador. La Asociación Cultural Tientapanza inició su actividad en 2004, a iniciativa de vecinos y comerciantes del barrio de El Carmen, y solo ha faltado a su cita festiva en dos ocasiones, en concreto, los dos años consecutivos en los que Tientapanza se quedó sin desfilar por culpa de las lluvias y las inundaciones.
La cabalgata de Tientapanza recupera una tradición local, la del personaje que, en Pascuas, visitaba a los niños ecijanos cuando dormían, les tocaba la barriga para comprobar que habían comido, para que los niños supieran que Tientapanza se lo diría a los Reyes Magos y estos traerían al pequeño los regalos que había pedido.
Desde hace dos años, a la carroza de Tientapanza la acompañan gigantes y cabezudos, el Rey y la Reina y los cabezudos de los ‘malillos’, un niño y una niña ataviados con un baby azul homenaje a las Escuelas Profesionales de la SA.FA., el torero, el picador, el hombre del saco y la bruja.