El Club Piragüismo Écija se pone a punto tras la riada
Tres inundaciones en un año ha sufrido el Club Piragüismo Écija. La última crecida del Genil, la pasada semana, el agua alcanzó 1,5 metros en la sede del club, a orillas del río.
“Todo el mundo pensará que si son piraguas el agua no les hace daño, pero tenemos piraguas, palas de fibra de vidrio que son de competición que se deterioran mucho al estar prolongadamente bajo el agua y otros utensilios”, señalan los palistas.
Según fuentes del club, las dos riadas anteriores “no llegaron a los 40 centímetros por lo que los daños fueron mínimos”. En esta ocasión, la crecida del Genil afectó no sólo al material deportivo, “también a muebles y enseres, y aunque el material deportivo está adaptado al agua no lo está a la lima que, por efecto de su peso puede llegar a deformar las piraguas e incluso a romperlas”.
Esa misma lima también puede deteriorar “de gravedad” otros materiales deportivos de los piragüistas, “desde chalecos salvavidas o cubrebañeras a palas, cascos y otros”.
Los socios del Club Piragüismo Écija se han puesto “manos a la obra, y el pasado domingo día 11 después de bajar el nivel limpiamos el local y material deportivo, a la espera de la próxima”, comentan resignados.