Fuentes y La Campana celebran 24 años unidos por la carrera ‘Los Chamuscaos’
Este domingo se celebra la 24ª edición de la carrera popular de ‘Los Chamuscaos’, una tradicional prueba deportiva que recorre la distancia entre los municipios de Fuentes de Andalucía y La Campana, que tiene su origen en 1993.
La carrera se disputa sobre una distancia de 16 kilómetros. Tiene la particularidad de alternar la salida cada año desde un municipio. Esta edición partirá desde Fuentes de Andalucía, a las diez de la mañana, y tendrá su meta en La Campana.
Una de las novedades este año es “la apuesta por realizar el avituallamiento con vasos biodegradables, eliminando botellas de plástico para hacer una carrera respetuosa con el medio ambiente”, apunta el alcalde de Fuentes de Andalucía, Francisco J. Martínez.
A la llegada, ya en el término municipal campanero, está prevista la entrega de premios, amenizada por actuaciones musicales y que coincidirá con la Feria de Asociaciones “para que todos los participantes y visitantes puedan conocer el tejido asociativo del municipio y disfrutar tras la carrera”, explica el alcalde de La Campana, Manuel F. Oviedo.
Este año se espera de nuevo superar los 350 corredores, una media de participación que se mantiene desde los últimos años, y que se ha superado en algunas ediciones, en que han llegado a tomar la salida 500 participantes. El precio de la inscripción, aún abierta, es de siete euros, con entrega de una sudadera para todos los participantes.
El curioso nombre de ‘Los Chamuscaos’ se atribuye a dos leyendas populares por las que ambos municipios se han atribuido el apodo de ‘chamuscaos’. Por un lado, se dice que una imagen de San Lorenzo fue trasladada de La Campana a Fuentes de Andalucía para ser restaurada. A su regreso, para protegerla del sol, se cubrió con tela de yute. Al destaparla la tela se había pegado a la imagen y, para desprenderla, se le prendió fuego a distancia, lo que chamuscó la imagen.
Desde entonces, los fontaniegos dicen que los ‘chamuscaos’ son los campaneros, porque el que quemó al santo fue un vecino de La Campana, y los campaneros atribuyen esta condición a los fontaniegos por considerarlos responsables de la quema.
La otra leyenda dice que ambos pueblos aprovechaban unas zonas comunes del término de Carmona para pastos de ganados y madera y leña. La condición de uso era que lo preservaran del fuego y si un día ardía perderían el derecho de aprovechamiento. Por circunstancias no conocidas un día se chamuscó. Desde entonces ambos pueblos tienen ese mote, que les sirve para celebrar una carrera que les hermana.
