Ángel García Palacio expone su ‘Pintura en la periferia’
Hasta el próximo 4 de enero, el artista local Ángel García Palacio exponer en el Museo Histórico Municipal, en el Palacio de Benamejí, una muestra de sus cuadros, que ha bautizado como ‘Pintura en la periferia’.
Los académicos José Luis Jiménez Sánchez-Malo y Fernando Martín Sanjuán, y el diseñador gráfico Guillermo Gómez Puche, comentan la obra de García Palacio, “pintor de raza, y de escuela”, según Jiménez Sánchez-Malo, que “llena sus trabajos con todo el contenido que puede aportarles, toda la ilusión, todo el fervor”.
“El saber es dominio”, continua Jiménez Sánchez-Malo, “y por ello sus obras atesoran, para embriagarnos, malvas, dorados, grises, pardos, azulinos, cales refulgentes y finas encarnaduras que palpitan como la carne misma; y un dibujo, piedra de toque, que se muestra, y expresa, apacible, domado y bien domado”.
Por su parte, Gómez Puche sostiene que Ángel García Palacio “es un pintor metódico y reflexivo”, algo que “queda patente en su obra, tanto en el constante perfeccionamiento de su técnica como en sus inquietudes estéticas. Su perseverancia en la búsqueda de un lenguaje propio, su afán de conocimiento y su inagotable creatividad convierten su obra en algo en constante evolución”.
Entre las influencias de García Palacio, Gómez Puche cita algunas tan dispares como Dalí, Cézanne, H.R. Giger, o los más nuevos como Lita Cabellut, Jeremy Mann y César Santos, que “hacen de Ángel un pintor ecléctico y versátil, con capacidad para sorprendernos en cualquier disciplina”.
Por último, Fernando Martín Sanjuán subraya el carácter autodidacta García Palacio y su origen en el mundo de la creación publicitaria, de la que el artista usa sus técnicas gráficas. “Nos encontramos ante un artista tremendamente reflexivo, exigente y muy sólido, con un potencial de recursos técnicos y sentimientos que indudablemente le harán convertirse en un referente de la pintura andaluza”, vaticina el arquitecto y académico.
En ‘Pintura en la periferia’, García Palacio muestra retratos como escenas de vida cotidiana, paisajes urbanos y de la campiña astigitana con grafismos superpuestos que descontextualizan la escena y conforman un lenguaje pictórico propio.
