Lluvia pero de regalos
La mágica noche de Reyes en Écija llegó un día antes de lo previsto para esquivar los malos augurios de la tarde del 5 de enero. Y la ilusión y la alegría de los más pequeños no se dejaron amedrentar.
La Cabalgata de Reyes se adelantó 24 horas para garantizar que la magia de la festividad no se viera empañada por la lluvia. El 4 de enero hubo lluvia también, pero de regalos. Familias enteras salieron a la calle ansiosas ante la llegada adelantada de SS.MM. Melchor, Gaspar y Baltasar.
A las cuatro y media de la tarde comenzó el desfile desde las naves del polígono industrial El Limero. Abriendo paso, la Reina Sol, la Reina Luna y el Ángel Anunciador, las tres carrozas de las hermandades ecijanas de La Sangre, El Rocío y La Soledad. No faltaron la Nave del Faraón, el barco de la Peña del Écija Balompié y la carroza del Écija CF, habituales en los últimos años.
Cerrando la cabalgata, la Estrella de Oriente, el también tradicional Tientapanza y el Gran Visir de la otra hermandad fija ya en el desfile de los Reyes Magos, la hermandad del Silencio. Tras ellos, el Cartero Real y las carrozas de Melchor, Gaspar y Baltasar.
Finalmente, la cabalgata concluyó en la rotonda de la Avenida Miguel de Cervantes, junto al parque infantil. La lluvia, que empezó siendo una preocupación, acabó siendo solo un telón de fondo para una noche llena de sonrisas, caramelos e ilusión.
