A pleno el cambio en el interés fijo del préstamo a Aqua Campiña
El Ayuntamiento de Écija debatirá el próximo lunes en pleno la posibilidad de revertir el cambio en el interés fijo del préstamo de la empresa privada Aqualia a Aqua Campiña, la sociedad mixta que gestiona el abastecimiento y la depuración de agua en Écija. Aquella tendrá que devolver a esta unos 643.000 euros.
El cambio en el interés del préstamo – de Euribor a 0,32% a un interés fijo del 5,60% – fue aprobado en mayo de 2012 en el consejo de administración de Aqua Campiña, vulnerando el acuerdo firmado en julio de 2001 por el que se formaba la empresa de abastecimiento de agua, participada en un 10% por el Ayuntamiento de Écija pero con el 90% de su capital privado.
Ese consejo de administración cambió las condiciones del préstamo de 1.500 millones de pesetas (9 millones de euros) que Aqua Campiña debía devolver a Aqualia, y que está aportó en 2001 para formar la nueva sociedad, que suponía la privatización de un servicio que, hasta entonces, prestaba la empresa municipal Aguas de Écija.
Ese cambio en el interés fijo “no era acorde a la ley y ni siquiera acorde con el contrato del agua”, según el alcalde de Écija, David García Ostos (PSOE), que llevó al consejo de administración de Aqua Campiña el acuerdo para revertir esa medida, “pero la empresa Aqualia decidió que se dejara sobre la mesa”.
“El informe dice que se incumple una cláusula del contrato”, explica García Ostos, que “como alcalde, me veo en la obligación de llevar al pleno, órgano de contratación, la propuesta que llevé al consejo de administración pidiendo primero la reversión para que se vuelva a pagar el Euribor más uno y, en segundo lugar, que el dinero que se ha pagado de más, casi 700.000 euros en intereses, revierta a la empresa Aqua Campiña”.
El alcalde ecijano entiende que esos más de 600.000 euros cobrados de más por Aqualia a Aqua Campiña no se ha cobrado a los ciudadanos de Écija “porque el recibo del agua no ha cambiado ni ha habido cambio en la tarifa del agua” y prefiere que sirva para equilibrar la cuenta de gastos de la empresa encargada del abastecimiento de agua para evitar “la posibilidad de que Aqualia pueda tomar la decisión de aumentar la tarifa del agua”.