Ciclismo bajo el sol
Hoy empieza el verano y el Club Ciclista Ciudad del Sol ha decidido darle la bienvenida. Más de 300 corredores están inscritos en la VIII Ruta del Calor, una maratón en bicicleta todo terreno (BTT) que discurre por los términos municipales de Écija, La Luisiana y Cañada Rosal y que este año entra por primera vez en el circuito provincial.
La Ruta de Calor son dos carreras: una de 100 kilómetros, el Recorrido del Calor; y otra de 65, la Ruta del Lagarto. Ambas tienen el mismo denominador común, el calor sofocante y la dureza de un terreno agreste.
La carrera muestra la Campiña sevillana en su más duro esplendor en el inicio del verano. Los corredores salen a las 8.00 horas, para quitarse algo del calor de junio, al que no pueden evitar, ya que el más rápido emplea cuatro horas en cubrir la ruta y, por término medio, los participantes pueden pasar alrededor de seis horas sobre la bicicleta.
“Si no, no haríamos honor al nombre”, señala Francisco Javier Vega, miembro del Club Ciclista Ciudad del Sol. Y es que la dureza de la prueba y las elevadas temperaturas son el principal atractivo de la Ruta del Calor. “La terminan todos salvo avería”, dice Vega, “porque el que viene a correr sabe a qué viene y entrena porque sabe de lo duro de esta prueba”.
En ambos recorridos hay alturas que coronar. En la Ruta del Calor hay que coronar cerros como Palomarejo, de casi 300 metros de altura, o Cerro Gordo de la Palma, de unos 250. Este recorrido tiene un desnivel acumulado de casi 1.700 metros. En la del Lagarto se sube una altura máxima de 201 metros y desniveles que subir que suman 821 metros.
El Club Ciclista Ciudad del Sol – con treinta años de bagaje – quiere que la Ruta del Calor sea una prueba que pueda dar a conocer a Écija. “La BTT está en auge, se ha puesto de moda, y queremos aprovechar ese tirón para promocionar este deporte y también la ciudad”, concluye Vega.
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