abril 24, 2024
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Cultura

Ateneo Ecijano: dos años de autogestión y cultura alternativa

El Ateneo Cultural Ecijano ha cumplido dos años de vida y lo ha celebrado con una fiesta en la barriada de Cañato, una muestra de las actividades de cultura alternativa que lleva promoviendo esta asociación desde que nació en 2013.

En los dos años que lleva en funcionamiento, el Ateneo Cultural Ecijano ha organizado múltiples actividades sociales y culturales, desde teatro a conferencias de diversos temas, libros, pintura, castellano para extranjeros y actos de contenido político y social.

“Son ya dos años de ilusión, trabajo y esfuerzo”, resumen Elena Aguilar y Juanma Luna, dos de los promotores del centro de actividad contracultural de la calle La Victoria, “y hemos querido celebrarlo con toda la gente de Écija, para que toda la ciudad conozca nuestras actividades”.

Así, en la fiesta por los dos años del Ateneo ha habido talleres de batukada, de yoga y de rol, pintacaras y cuentacuentos para los más pequeños, una barra y comida para paladares que no temen arriesgarse, un zoco artesanal, nociones de reiki y terapias alternativas y también, cómo no, música en directo, con conciertos de swing, rap y reggae.

También un zoco artesanal, tenderetes con libros, adornos y juguetes. Todo para mostrar la diversidad que lleva dos años cultivando el Ateneo Cultural Ecijano. “Fue un proyecto arriesgado, la gente no estaba acostumbrada a este tipo de actos”, rememora Juanma Luna de los primeros pasos del Ateneo.

“Buscábamos un espacio de participación para desarrollar actividades culturales que no tenían un sitio, desde teatro a conferencias de diversos temas, a presentación de libros, cursos de pintura, de castellano para extranjeros, y también y sobre todo con un contenido político, social”, señala Luna.

Porque el Ateneo es un espacio cultural pero también político. “Nos mueve el crear otras formas de relación, trabajar día a día por transformar el mundo”, señalan Luna y Aguilar, que hablan del Ateneo Cultural como un proyecto común de “crear conciencia e ir tomando poder”.

Hasta ahora la asociación se ha mantenido de forma autogestionada. No recibe subvenciones ni las busca. Se mantiene con aportaciones de sus miembros “y por las actividades que se van generando, para mantener la independencia, la autonomía del proyecto”. “Van apareciendo personas y proyectos que se van sumando, que se van acercando con ganas de crear, de hacer algo”, dice Elena Aguilar.

“Aquí viene gente muy diversa, que no tienen la misma motivación, que vienen aquí para cosas distintas pero sí comparten la misma inquietud por otras cuestiones”, resume Luna, que pone el objetivo fundamental “en mantenernos como estos años”. Para Elena Aguilar “se han iniciado proyectos… y los que quedan. Hay un grupo de consumo de productos ecológicos, sin intermediarios, la biblioteca crece y, sobre todo, el Ateneo es un punto de encuentro de personas que quieran hacer cosas distintas”.