Hablemos del equipo

Heroico empate (2-2) del Écija Balompié en un encuentro que se le escapó en el último suspiro, tras un despliegue físico inconmensurable, una remontada épica y una polémica actuación arbitral.

Rafa Martín Recio

El planteamiento inicial de los astigitanos es realmente valiente y llevando el peso del partido. A los tres minutos, Rubén Cruz busca a Ayina y el francés no sabe definir ante el guardameta Munir. En el 13, llega el primer aviso serio de la U.D. Melilla, con un cabezazo de César Díaz que se estrella en el larguero. A medida que avanzan los minutos, los melillenses se encuentran cada vez más cómodos; y el marcaje férreo de Carlos David a Rubén Cruz invalida cualquier posibilidad de ataque por el centro.

Fruto del mejor planteamiento, se adelanta la U.D. Melilla. En el minuto 24, un buen pase interior en el contraataque habilita a César Díaz y éste bate por bajo a Ramón. Los azulinos, lejos de venirse abajo, buscan rápido la igualada. Antoñito está cerca; y cuatro minutos después del gol melillense, Ayina baja a la perfección un balón servido desde la derecha y lo aloja en las redes.

Y comienzan los problemas. En el 37, Ayina ve la roja directa por una supuesta agresión a Carlos David y deja a su equipo en inferioridad numérica. De aquí al descanso, el Écija sufre y espera ansiosamente el descanso.

Con nueve toda la segunda parte. Los locales ingresan en la segunda mitad sin complejos y de forma eléctrica. El colegiado, Cruz Quintero, no presta atención a unas posibles manos en el interior del área melillense; en cambio, sí ve infracción en una leve falta de Blanco que significa la segunda amarilla y deja al Écija con nueve apenas iniciada la segunda mitad. Pero esta circunstancia hace crecerse a los hombres de Rivera. Jugando con un 4-3-1 y muy ordenados, buscan con rapidez la contra y Pizarraya tiene dos oportunidades para poner a su equipo por delante en el marcador. En el 69, Astrain se incorpora en ataque y saca un centro desde la izquierda al que no llega Óscar por muy poco.

Con dos hombres más, los melillenses se acercan algo más al área de Ramón, donde suceden un par de jugadas polémicas también inexistentes para el árbitro. Y en el 76, Coco avanza por la izquierda pegado a la cal y, tras marcarse una jugada magistral, retrasa a Rubén Cruz para que éste haga el segundo gol y lleve el delirio a las gradas.

El fútbol estaba siendo grande, los azulinos estaban luchando contra todos los elementos y la victoria era un sueño alcanzable. Pero el sueño se torna pesadilla. Para sorpresa de todos, Rubén Cruz ve la roja en el 89 por doble amonestación y el equipo se queda con ocho efectivos. El partido agoniza, pero da tiempo para que César Díaz saque un gran latigazo desde fuera del área y establezca un injusto empate.

Estadio Municipal San Pablo: unos 1.100 espectadores, en mañana fría y soleada.

Écija Balompié: Ramón; Blanco, Astrain, Óscar, Mario Pizarraya; Antoñito, Nando, Requena (Coco, min. 56), Migue (Guerrero, min. 86), Rubén Cruz; y Ayina.

U.D. Melilla: Munir; Andrés Sánchez, Amarito, Mahanan (Martínez, min. 76), Sergio Sánchez; Quique de la Mota, Carlos David (Domenech, min. 56), Vázquez, Nacho Aznar (Borja, min. 81), César Díaz; y Chota.

Colegiado: Jonathan Cruz Quintero (colegio tinerfeño). Mostró cartulina amarilla a los locales Blanco, Requena, Rubén Cruz y Óscar; y a los visitantes Nacho Aznar, Carlos David, Mahanan y Quique de la Mota. Expulsó con roja directa al local Ayina; y por doble amonestación a los también locales Blanco y Rubén Cruz.

Goles:

0-1: César Díaz, min. 24.
1-1: Ayina, min. 28.
2-1: Rubén Cruz, min. 76.
2-2: César Díaz, min. 89.