La alcaldesa descarta mediar por las familias afectadas por un fondo buitre

Las 91 familias afectadas por la venta de sus viviendas en el barrio de La Alcarrachela, en Écija, siguen sin respuestas claras ante el problema que atraviesan desde que sus hogares fueran adquiridos por un fondo buitre que lleva seis años sin pagar impuestos. La alcaldesa de Écija, Silvia Heredia (PP), no se ha comprometido a resolver la situación, más allá de proponer una reunión entre las personas afectadas y el fondo buitre.
La empresa propietaria de las viviendas – subastadas tras la quiebra de la empresa municipal Sedesa, aprobada durante el anterior mandato del PP – lleva desde el año 2018 sin pagar sus impuestos municipales, ni paga tampoco a la Agencia Tributaria, lo que ha obligado a las personas inquilinas a asumir, vía embargo, deudas fiscales que corresponden al fondo buitre.
“Le hemos pedido un compromiso municipal de apoyo, y no ha dado ninguno. Lo único que ha aceptado es sentarse con la empresa para exponerle la situación, a pesar de que sabemos que esta empresa no ha pagado nunca los impuestos”, explica Eligio García Jódar, portavoz municipal de IU-Podemos Écija, que respalda la reivindicación de los vecinos de esas viviendas.
García Jódar critica también que la alcaldesa se haya negado a incluir a la Junta de Andalucía en las negociaciones, a pesar de que esta institución tiene competencias clave en materia de vivienda.
“Hemos salido con un sabor agridulce. La alcaldesa nos ha dicho que va a hablar con la empresa, pero no tenemos respuestas claras a nuestras dudas”, lamenta Carmen Ruiz, portavoz de las familias afectadas, que mantienen un contencioso administrativo para anular la venta de sus viviendas y recuperar su titularidad pública. “No sabemos qué pasará si la sentencia no nos es favorable, ni cómo se resolverán los embargos de impuestos que debemos pagar por culpa del fondo buitre”, afirma Ruiz.
Según las familias afectadas, la alcaldesa ha descartado cualquier posibilidad de intermediación con la Junta de Andalucía. Ante la falta de avances, las familias han anunciado que volverán a movilizarse si no reciben respuestas concretas en los próximos días. “Si no nos citan con la empresa o no hay soluciones, saldremos a la calle otra vez. Nos encerraremos en el Ayuntamiento si es necesario, pero no vamos a quedarnos quietos”, advirtió Ruiz.