Limpian y arreglan el colector del Argamasilla hasta Puerta Osuna
La empresa encargada del suministro de agua, Aqua Campiña, ha terminado de reparar el colector subterráneo del arroyo Argamasilla en el tramo que discurre entre la calle John Lennon y Puerta Osuna, prácticamente el doble de lo inicialmente previsto, ya que la previsión era recuperar el tramo dañado por las inundaciones de marzo pasado hasta la plaza del Matadero.
Las obras han tenido un presupuesto de 80.369 euros y se han llevado a cabo en un plazo de dos meses. “Queda rematar los accesos abiertos en la calle para acceder al arroyo, pero está básicamente terminada la limpieza y mejora del colector”, señala Javier Blanco, gerente de Aqua Campiña.
Las tareas de arreglo en el tramo soterrado del Argamasilla han consistido en la limpieza del conducto y la reparación de las zonas dañadas por las riadas, con la reposición de la solería en varias partes y la construcción de una canaleta “para conducir las aguas residuales”, relata Blanco, “junto con el forjado y el reforzamiento de los paramentos” del colector.
También se ha llevado a cabo la impermeabilización de las paredes laterales de este tramo, “el que soporta la mayor avenida de agua en caso de de crecida”, explica el gerente de Aqua Campiña. Antes de la reparación, prácticamente no existía la solería de hormigón pasados los primeros 55 metros del colector, según los informes previos.
Para el alcalde de Écija, Ricardo Gil-Toresano (PP), “es importante que se haya hecho esta actuación, pero sobre todo que se acabe si es posible en 2014 el desvío del cauce y este colector quede principalmente para el desagüe de aguas fecales y no tengamos que estar preocupados por las crecidas del arroyo”.
El mal estado del tramo del cauce soterrado del Argamasilla bajo la calle John Lennon y la cercanía de la época de lluvias, llevaron al Gobierno local (PP-PA) a contratar las obras con urgencia, “ante la situación de grave riesgo para personas y bienes” que provoca el mal estado de ese sector.
Un informe de la concejalía de Medio Ambiente alertaba que, tras las riadas, se había reducido la capacidad de desagüe del colector, atascado por sedimentos, llegando a detectar material acumulado de gran calibre en sus primeros 200 metros, “alcanzando alturas de 70-80 centímetros de espesor”.